En el mundo del deporte existen grandes desafíos; cuando hablamos de natación, la Triple Corona es sinónimo de entrega, fortaleza, determinación y valor. Se trata de un reconocimiento de la Asociación Mundial de Aguas Abiertas a nadadores que hayan completado las siguientes pruebas de natación de larga distancia:
El Canal de la Mancha Inglaterra- Francia.
La vuelta a la isla de Manhattan, Nueva York.
Nadar desde la isla Santa Catalina hasta Los Ángeles, California.
El lograr concluir estos tres nados, que al sumarlos dan al menos una distancia mínima de 113 km, son un muestra de la capacidad física, mental y disciplina del nadador. Es un reto de alto riego, donde factores como la temperatura, oleaje, vientos y fauna se ponen en contra del hombre, llevándolo hasta el límite de sus capacidades.
Carlos Franco al día de hoy, ha logrado coronar su primer reto, cruzando el canal de la mancha y se entrena para vencer el siguiente: la Isla de Manhattan. Pero su visión no termina ahí. Grandes sueños se traducen en grandes desafíos, es por eso, que superando la triple corona, se enfrentará al cruce de dos continentes, donde el océano atlántico y el mar mediterráneo convergen, atravesando el legendario estrecho de Gibraltar, como antesala a su mayor contienda: Nadar una milla en la Antártica.
#HaciaLaAntartica